RELIEVE
Relieve es la desigualdad vertical que tiene la corteza terrestre. El relieve es el resultado de un determinado modelado sobre una estructura concreta de la superficie terráquea.
En el modelado intervienen varios factores, que combinados da lugar a su diferenciación en unidades estructurales.
En un aspecto de la geografía física la geomorfología es la que estudia científicamente el relieve de la Tierra. Le corresponde la misión de describir los paisajes a la luz de los factores que originan deformaciones en el relieve terrestre.
El relieve de un lugar se debe a su estructura, o sea, a la forma como están dispuestas las rocas en la litósfera. Así como la acción de las fuerzas internas que actúan sobre ella como son el tectónismo y el vulcanismo.
Asimismo, el relieve sufre transformaciones por acción de fuerzas externas que como los hielos, aguas, vientos, etc., modelan las formas ya sea por desgaste de las rocas transportando los materiales y depositándolos en las partes bajas. Estas fuerzas externas y internas son las creadores del relieve: las externas constituyen las formas y las internas, lo modifican o modelan.
PRINCIPALES TIPOS DE RELIEVE[6]
Existen dos tipos de relieve, el continental y el submarino. Si se considera que la máxima elevación continental es la del Everest, situado en la cordillera del Himalaya en Asia, con 8,847m. de altitud, y la mayor profundidad oceánica es de 12,395 m. que corresponde a la fosa de Cook, cerca de Mindanao, Filipinas, en el Océano Pacífico, la diferencia es de 21,242 m., lo cual significa que las variaciones en el relieve terrestre, comparadas con las dimensiones de la Tierra, son muy pequeñas.
